Esta mañana, Jeff Sessions, senador de Alabama, fue juramentado por el vicepresidente Mike Pence como el fiscal general de los EE.UU. y tomó la oportunidad de reitero que el país debe poner fin a la inmigración ilegal.
“Necesitamos poner fin a esta falta de ley que amenaza la seguridad pública y reduce los salarios de los trabajadores estadounidenses”, dijo Sessions durante su juramentación en la Oficinal Oval.
Desde que fue nombrado por el presidente Donald Trump como su nominación para el fiscal general por posturas anti-inmigrantes y sus pasados comentarios racistas, Sessions ha recibido mucha oposición.
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Su juramentación como fiscal general preocupa a muchos porque como fiscal general es el líder del Departamento de Justicia y el jefe de la policía de todo el gobierno federal. Como fiscal general, Sessions tendrá control e influencia sobre cómo asuntos como los derechos civiles, la violencia policial, y la reforma de la justicia penal se manejan a nivel nacional.
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El ex senador de Alabama defendió sus posturas migratorias, “Necesitamos un sistema legal de inmigración que sirva al interés de la gente de los Estados Unidos, eso no es malo, eso no es inmoral, eso no es indecente”.
El presidente Donald Trump también defendió a Sessions diciendo que seria “un gran protector del pueblo”.
